La vida no está hecha para tenerlo todo a tu alcanze sin hacer un esfuerzo. Vale la pena ganarse las cosas con nuestro propio sudor. Vale la pena sonreír por algo que sabemos que nos ha costado pero tuvimos el valor suficiento como para no rendirse y creer que sería posible. Todo es posible si de verdad quieres.
lunes, 7 de noviembre de 2011
viernes, 4 de noviembre de 2011
Aquí otra vez.
Después de un segundo, o milésimas de segundo. Me vuelvo a girar hacia ti. Y es que no puedo esperar ni un momento sin mirarte, sin sonreírte, no puedo pasar ni un momento sin ti.
Ahora, ya no.
Ahora, ya no.
jueves, 3 de noviembre de 2011
YMTVPV.
Estoy asentada en esta aburrida habitación y repaso lo que día a día me vas diciendo.
Repaso en mi mente cada mirada, de esas que me vuelven loca. Repaso cada sonrisa que muchas veces me desearía comer. Y repaso cada gesto tuyo que por muy pequeño que fuera, simplemente con ese poco, puedes alegrarme el día entero.
Repaso todo lo escrito, y todas las palabras que se quedaron en el aire. Repaso tu silueta poco a poco y vuelvo a repasar una de tus miradas que poco antes terminaba de ser testigo de mi sonrisa.
Creo que mi mente va a estallar.
Repaso en mi mente cada mirada, de esas que me vuelven loca. Repaso cada sonrisa que muchas veces me desearía comer. Y repaso cada gesto tuyo que por muy pequeño que fuera, simplemente con ese poco, puedes alegrarme el día entero.
Repaso todo lo escrito, y todas las palabras que se quedaron en el aire. Repaso tu silueta poco a poco y vuelvo a repasar una de tus miradas que poco antes terminaba de ser testigo de mi sonrisa.
Creo que mi mente va a estallar.
Tan simple como respirar.
Me he equivocado un número bastante elevado de veces. ¿Como coño crees que aún temo a equivocarme de nuevo?
Al final, una se acostumbra a caer continúamente y a levantarse, incluso a veces sola. Una aprende a sonreír a pesar de todas las circustáncias en las que se puede encontrar.
Da igual si caemos, siempre habrá momento para levantarse y seguir viviendo sin límite.
Al final, una se acostumbra a caer continúamente y a levantarse, incluso a veces sola. Una aprende a sonreír a pesar de todas las circustáncias en las que se puede encontrar.
Da igual si caemos, siempre habrá momento para levantarse y seguir viviendo sin límite.
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